Hola otra vez. ¿Cómo lo llevas? Yo agobiada por el calor, la verdad. Ni siquiera enciendo los fogones de la cocina. Pero tengo un truco para preparar los mejores platos. Utilizo un súper ingrediente como comodín: el queso.
Si te parece extraño, o fuera de temporada, comer queso en verano, te paso unos grupos de recetas para que triunfes sin trabajo ni sudores. Y, al final del artículo, comparto contigo tres secretos. ¿Quién da más por menos? Allá voy.
Tablas y mesas de quesos
Y quien dice «tablas o mesas» dice un plato o bandeja bonito, con unos trozos de queso ya partido (por ejemplo, un queso azul, gallego de tetilla, queso de cabra fresco) adornados con unos frutos secos o unos higos (fruta de temporada) Ya tienes un entrante, plato principal o postre.
Ensaladas
Ensaladas de vegetales, pasta, arroz, legumbres. Más rápido, fácil, divertido y nutritivo, imposible. Receta: abres un bote de mini alubias. Cortas dados pequeños de tomate, pimiento verde, cebolla. En un bol, mezclas y aliñas a tu gusto. En el plato, una cama de canónigos, la montaña de ensalada y unas lascas de queso de mahón.
Gazpachos y cremas frías
El procedimiento es parecido al anterior. Si te quieres quedar con el personal: sirve plato con una isla de queso a dados, tomate y manzana. Ya en la mesa, viertes el gazpacho que sirves con una jarrita. Cosa más fácil y resultona, no existe.
Gratinados
Parece complicado y no lo es. Puedes gratinar casi cualquier cosa. Empezando por una rebanada de tu pan favorito y tu queso (o mezcla) por encima. Ya tienes tu panini, añade otros ingredientes si te apetece. Asa verduras (tomates, pimientos, berenjenas, calabacines, patatas…) y añade queso por encima. Si tienes barbacoa, una vez en el plato el pollo o la carne, tu queso predilecto por encima, fundirá por el mismo calor. Una delicia.
Postres
Los quesos sirven para hacer muchas tartas, pasteles, helados…. Una receta de principiantes y que no necesita horno ni cocina. Unos tarros de cristal. En el fondo, tu galleta favorita triturada con la mano (sí, la que utilizas para el desayuno) Encima, una capa generosa de yogur natural. Otra capa de miel o mermelada. Unos trozos de tu queso predilecto y acabas con unos trozos de fruta fresca (higo, uvas, cerezas, melocotón…)
El truco del almendruco:
1.- variedad en la elección de los quesos.
2.- la comida entre por los ojos, la presentación es fundamental
3.- El queso en su justa medida.
Este último punto me lleva a la polémica pregunta ¿son caros los quesos? Si quieres un truco para gastar poco comprando queso, síguenos en las redes sociales y en el blog.
Disfruta del verano, comiendo queso.